El trabajo consiste en podar los árboles cuyas ramas estén desparejas en altura o estén creciendo hacia abajo, en algunos casos dificultando el paso del peatón y en otros los vehículos.
Se pretende mantener la copa de los árboles, siempre y cuando no molesten o generen inconvenientes en cruces de cables o alumbrado público.
La actividad comienza en las avenidas, pero luego se continuará en distintos sectores de la localidad.